domingo, 5 de enero de 2014
El Dios en el que creo y la evolución de mis imágenes sobre Él-Ella
¿Cómo tener paciencia,
quienes vivimos del Amor
Si nos precede en el camino
y siempre se nos escapa...
Amor exige al Amor
Más que lo que la inteligencia entiende (Hadewijch de Amberes).
1- LA IDENTIDAD INCÓMODA, FRONTERIZA Y AGRADECIDA DE MI EXISTENCIA Y MI FE.
No puedo hablar del Dios en quien creo al margen de la mujer que soy, por eso con pudor me atrevo a presentarme en unas breves líneas: Soy una mujer de 47 años con una identidad múltiple y heterodoxa: soy mujer cristiana, monja, feminista y de izquierdas. Una identidad arriesgada por su incomodidad y por su inclasificabilidad que me hace de algún modo “forastera” en las propias tierras que me configuran. Soy lo que algunas y algunos consideran alguien imposible o inexistente, pero mi existencia, como las de otras muchas como yo, muestra que aunque a menudo se nos reduzca a la invisibilidad existimos y somos posibles. Existencias incómodas, contradictorias pero felices y tercamente esperanzadas y resistentes, apasionadas por Dios y por su Reino.Un Dios que a lo largo de nuestra historia se nos ha hecho “mutable”, nos ha ido desvelando destellos de su misterio encarnado y al calor del fuego con que nos ha impregnado el corazón nos ha ido conduciendo y nos conduce, sostenidas en y por el pueblo de Dios, hacia transformaciones profundas, inéditas de nuestro ser más hondo y de nuestro modo de estar en el mundo y en la iglesia. Comparto con la brevedad que suponen las escasas páginas que se nos piden para ello la evolución de algunas de mis imágenes del Dios en quien hoy creo, el Dios que fundamenta y sostiene mi existencia.
viernes, 3 de enero de 2014
Libros
-Descolonizando el Feminismo: Teorías y Prácticas desde los Márgenes. Liliana Suárez Navaz y Rosalva Aída Hernández Castillo. (editoras),Cátedra, 2008.
El reto de los feminismos en el siglo XXI es un reto de dimensión global que requiere el reconocimiento de la diversidad cultural. Siendo aún central la lucha por la equidad de género, el desafío pasa por identificar y superar herencias coloniales que obstaculizan el avance de los feminismos del nuevo milenio. Este libro es fruto del esfuerzo por construir puentes de comunicación entre diversas tradiciones feministas que no han estado lo suficientemente representadas en la literatura feminista académica y que aportan nuevas herramientas para la construcción de un feminismo postcolonial. Desde una perspectiva interdisciplinar, se recogen trabajos que han marcado un giro en los debates de la teoría de género en un ámbito internacional, al cuestionar visiones etnocéntricas que no habían considerado la articulación entre género y raza.
-Una teología arrodillada e indignada. Javier Vitoria F. Javier Vitoria Cormenzana, Sal Terrae 2013.
La teología de la Justicia discrepa siempre de una frase muy manida: No hay nada que hacer. La realidad la desmiente de continuo. En este mundo tejido de componendas y habilitado para que no tomemos nada completamente en serio, a no ser el propio interés, hemos podido contemplar y admirar un número importante de personas, que a pesar de las derrotas y los fracasos, continúan siendo beligerantes con la injusticia. Ellos y ellas testifican a diario que ser humano, humano, comprometido y fiel hasta el final es posible; y nos recuerdan que “el hombre sólo cabe en la utopía” (Ernesto Sábato). La potencia de lo débil cuando se inserta en la realidad como incansable aguijo escatológico, nos despierta y nos moviliza ante el escándalo de la diferencia cualitativa (H. Marcus) existente entre los crucificados de la tierra y los que los crucifican o cómplicemente pasan de largo “ (pág. 44)
Estreno el nuevo año con un blog
Estreno el nuevo año con un blog. No soy muy cibernauta, la verdad, prefiero el cuerpo a cuerpo en mis relaciones y también el rostro a rostro en la comunicación, pero las nuevas tecnologías se imponen. Este blog es como mi vida misma, un telar de historias y vidas que se entrecruzan y en cuya una textura se mezcla lo público y lo privado, lo militante y lo profesional, lo místico y lo político.
En él hallareis seguro erratas, porque lo mío es el aprender haciendo y uno de mis principios el ensayo error.
Bienvenidas y bienvenidos al blog de Pepa Torres Pérez
Bienvenidas y bienvenidos al blog de Pepa Torres Pérez
Ritos feministas interespirituales
Cuando las luchas contra las fronteras
nos hacen confluir desde lo hondo
Ritos feministas inter-espirituales
Te miro, eres negra.
Me miras, soy blanca
Y sonreímos las dos.
En el nuevo día que se adelanta
tú sabes y yo sé
que la complicidad que nos une
quiebra fronteras.
El misterio que brota
de nuestros vientres crecidos
acaricia la promesa de una tierra libre,
donde nadie sea ilegal, esclava ni
extranjera.
Por fin nos hemos encontrado
y nuestras diferencias,
ya no nos dividirán,
sino que serán también nuestra fuerza
( Reencuentro entre Sara y Agar. Otro
final posible para Gn 21, 1-10)
Así nació el colectivo Agar y el espacio de los ritos o encuentro espirituales que desde
entonces venimos celebrando mensualmente en Lavapiés. El colectivo
nace de una necesidad y un deseo que nos moviliza: fomentar el diálogo inter-espiritual desde una perspectiva feminista y de
base y propiciar espacios de encuentro, formación, investigación y compromiso
con la justicia, la paz y la integridad de la creación desde la diversidad
cultural y religiosa.Lo constituimos mujeres que “transitamos fronteras” y que
reivindicamos las diferencias no como una amenaza sino como una riqueza en
la construcción de una ciudadanía alternativa, desde la perspectiva de las
mujeres. Nos sentimos urgidas por una espiritualidad
política que trasciende toda religión y
busca espacios de convergencia.
En nuestro
rituales vamos compartiendo nuestras Fuentes
de la vida, nos reencontrarnos con la
mujer de Luz que nos habita y sostiene en tiempos oscuros, o nos
identificamos con la naturaleza y sus ciclos
desde las propias experiencias vitales: el otoño como tiempo de desnudez y
pérdida, como símbolo de nuestros duelos migratorios; la primavera como el
renacer de la vida desde la ampliación de horizontes a los que nos abre la convivencia intercultural
con otras mujeres o el equinoccio de verano como invitación a recuperar en nuestra
vida el fuego, la pasión, el placer. Desde la
experiencia vivida sentimos que vamos renovando esperanzas y anticipando el
sueño que lo imposible se va haciendo posible, lo utópico encuentra su topus en
la realidad.
Así, las
danzas de Miriam y las mujeres del Éxodo (Ex 15, 20-21), el cantar y la palabra
sapiencial de Débora (Jue 4-5), la complicidad de Rut y Noemí ( Rt 1, 16-22) la
dignidad restituida de Betsabé (1 Re1-2),el profetismo de Rabeiah Adawiya
(mística sufì del siglo VIII) o la libertad de Magdalena, Marta y María en
sus relaciones con el Profeta Jesús (Luc 10,38-41) (Luc 8,1-3) ( Jn 1,1-28) van
tomando cuerpo en nosotras y vamos experimentando juntas que la espiritualidad
feminista no tiene fronteras, ni moldes, ni diques, y que como dice Ivone
Gevara (1) es “el
sueño de la tierra prometida, que nos permite percibir de un modo nuevo la
existencia y su misterio que envuelve nuestro cuerpo y nos da coraje para vivir
y amar de nuevo y sentir que nuestros huesos resecos se llenan de músculos y
carne, se ponen en movimiento para un abrazado resucitado que envuelva a mujeres
y hombres del universo entero” .
En nuestros
ritos, el cuerpo, la danza, la música, lo gestual y simbólico, la expresión de
la propia palabra desde la tradición singular de cada una van siendo los
lenguajes que nos acercan y nos revelan la divinidad, la trascendencia que nos
habita y que es la fuente de nuestro ser y empoderamiento. Otras
veces iniciamos nuestros encuentros con
alguno de los 99 nombres con los que el
Islam invoca a Dios para pasar en un segundo momento a buscar conexiones con la experiencia espiritual de cada una
tomándonos la libertad de nombrarle reconocerle y practicarle desde nuestra
identidad sexuada, porque el Misterio, Dios, la trascendencia no puede ser
ajeno a nuestros cuerpos y experiencias como mujeres.
Otra de las
características de este espacio es la atención al proceso como pauta
orientadora del camino, como obediencia a lo real, al deseo que nos hace
converger como grupo y no a un plan o programa preconcebido. Esta atención
a la hondura, a lo que va pasando por el camino más que a lo que suceda al
final del recorrido nos proporciona momentos absolutamente mágicos cargados de creatividad que nos empistan hacia nuevos
proyectos como la exposición Piel de
diosas que vamos a iniciar este curso.
El proyecto
“Piel de diosas” nace de un
encuentro, un gesto corporal, una palabra ”cruzada” entre dos mujeres unidas
contra las fronteras, que tras participar juntas en una acción reivindicativa
en la calle por los derechos de las
sin-papeles y las empleadas de hogar
se reconocen mutuamente más allá de las diferencias impuestas por la etnicidad,
el status, la religión y las leyes de
extranjería. Un reconocimiento de mujer a mujer. El gesto y la palabra de una
mujer negra, senegalesa, musulmana, trabajadora doméstica, que tocando el rostro
de otra mujer blanca mexicana agnóstica, investigadora la reconoce por su belleza y valía: “¡Qué bonita y que blanca eres!
a lo que la mujer blanca mexicana responde devolviendo la caricia y el
reconocimiento “¡y tú que bella y que
negra eres!. El análisis de
este gesto de reciprocidad y reconocimiento entre
mujeres actualmente nos está
llevando a reflexionar sobre la belleza, el género y
la etnicidad así como la devaluación del cuerpo de las mujeres
en la representación de lo divino. Con el
proyecto “Piel de diosas” queremos
denunciar la exclusión y la manipulación de las mujeres “en nombre de lo divino” y reivindicar el poder de significar de
los cuerpos de las mujeres, el misterio y la sabiduría que portan liberándolos
del racismo y el sexismo.
Pepa
Torres. Colectivo Agar
J. COMBLIN, Cambio
social y pensamiento cristiano en América Latina, Madrid, Trotta, 1993 .
ALANDAR ( Diciembre 2013)
HAY VIDA MAS ALLÁ DE LA CRISIS
COMO
NUEVAS SIROFENICIAS (Mc
7, 24-31)
Ahí están. Llueve a cántaros pero ahí están, en la puerta de la comunidad de Madrid, sosteniendo varias pancartas que dicen “Desde la lástima nada, desde la dignidad todo”, “Trabajo decente para el empleo doméstico”. Unas cuarentas personas, la mayoría mujeres corean al unísono “Se acabó, se acabó la esclavitud”, “Porque sin nosotras no se mueve el mundo”, “Queremos empleo trabajo nos sobra “, “Levántate, empleada del hogar, lucha por tus derechos y visibilidad“. Más allá de la barrera policial, al interior del recinto de la Asamblea de Madrid cuatro compañeras están teniendo una comparecencia exigiendo que el gobierno español firme la ratificación del convenio 189 de la OIT[1] .
Ahí están, resilientes en plena tormenta, ante la lluvia torrencial con que Madrid ha amanecido esta mañana y el ciclón de una crisis económica que está siendo gestionada sobre sus espaldas, invisibilizando su aportación a la economía del país, sus intereses y sus derechos, y que, como bien dicen, ignora una cuestión crucial y es que “querían brazos, pero llegamos personas “. Ellas lo saben. No se achantan, ahí están, coreando como nuevas Joan Báez “No nos moverán estamos empoderadas, no nos moverán”. De pie, enfrentando vientos, abrazadas, sosteniendo y sosteniéndose, reclamando como nuevas sirofenicias lo que en nombre de una justicia injusta se les niega: Protección efectiva frente a toda forma de acoso, abuso y violencia laboral; contrato por escrito y condiciones dignas de trabajo: horarios, descanso, tareas, salarios, y control de las horas de presencia, acabar con los descuentos abusivos por la manutención y el alojamiento en el caso de las trabajadoras internas; Inclusión en la ley de riesgos laborales, garantía de condiciones de seguridad y salud, incluyendo respeto a la privacidad;. protección real frente a los abusos de las agencias de colocación e igualdad de derechos en la seguridad social con el resto de las personas trabajadoras.
Ahí están, resilientes en plena tormenta, ante la lluvia torrencial con que Madrid ha amanecido esta mañana y el ciclón de una crisis económica que está siendo gestionada sobre sus espaldas, invisibilizando su aportación a la economía del país, sus intereses y sus derechos, y que, como bien dicen, ignora una cuestión crucial y es que “querían brazos, pero llegamos personas “. Ellas lo saben. No se achantan, ahí están, coreando como nuevas Joan Báez “No nos moverán estamos empoderadas, no nos moverán”. De pie, enfrentando vientos, abrazadas, sosteniendo y sosteniéndose, reclamando como nuevas sirofenicias lo que en nombre de una justicia injusta se les niega: Protección efectiva frente a toda forma de acoso, abuso y violencia laboral; contrato por escrito y condiciones dignas de trabajo: horarios, descanso, tareas, salarios, y control de las horas de presencia, acabar con los descuentos abusivos por la manutención y el alojamiento en el caso de las trabajadoras internas; Inclusión en la ley de riesgos laborales, garantía de condiciones de seguridad y salud, incluyendo respeto a la privacidad;. protección real frente a los abusos de las agencias de colocación e igualdad de derechos en la seguridad social con el resto de las personas trabajadoras.
Circulos de espiritulidad Dabar
(Dirigido
a comunidades y grupos organizados)
UNA INVITACIÓN a contemplar y compartir la Palabra para ir “haciéndonos amigos y amigas de Dios y profetas “(Sb 7,27)
UN ESPACIO para ahondar en la Palabra desde una hermenéutica existencial, entrecruzar experiencias y celebrarlas.
A lo largo del curso se
ofrecen dos encuentros con posibilidad
de participar en ellos según las posibilidades
de cada persona.
DABAR
I: Recuperar la alegría en tiempos
de crisis. Iconos del Buen ánimo.
DABAR
II: La Palabra como fuente de alternatividad.
Ø ACOMPAÑADOS
por
Pepa Torres Pérez
[1]
Etimológicamente “Dabar” significa “Palabra” en hebreo